Un sismo de 6,1 grados en la escala abierta de Richter sacudió ayer Portugal, el sur de España y parte de Marruecos, y se convirtió en uno de los más fuertes de las últimas cuatro décadas. Aunque no causó daños ni víctimas, el terremoto provocó alarma y algunos edificios fueron desalojados por precaución.Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN) de España, el epicentro se localizó en el mar, a unos 200 kilómetros del Cabo de San Vicente (Portugal), donde se encuentra la falla Azores-Gibraltar, a 500 kilómetros de la ciudad española de Cádiz.Aunque afectó básicamente al sur de España, especialmente las ciudades de Sevilla, Cádiz, Huelva, Fuengirola (Málaga), Málaga capital, Jaén y Córdoba, también se sintió en algunas zonas de Madrid, especialmente en edificios altos.